5 Razones Por Las Que Debe Analizar El Refrigerante

Entre 40% y 50% de los problemas de los motores se deben a inconvenientes en el sistema de refrigeración.  La mayoría de estos problemas pueden detectarse en una fase temprana mediante muestreo y análisis del refrigerante.

Porqué es importante incluir Análisis de Refrigerante en su programa?

¿Ha perdido un motor y desearía haber detectado el problema antes que sucediera? O mejor aún, ¿y si pudiera determinar la causa de raíz del problema?  Implementar un programa de monitoreo y análisis del refrigerante a su programa actual puede hacer exactamente eso.

Controlar únicamente el lubricante ofrece una visión limitada del panorama completo del mantenimiento relacionado con los fluidos.

Las investigaciones han demostrado que cuando los médicos adoptan un enfoque integral del cuerpo, sus pacientes se curan más rápidamente, tienen un mayor índice de éxito y una respuesta más favorable a la medicación o terapia prescrita. Al pensar en nuestro equipo, deberíamos adoptar un enfoque similar. Si no está analizando su refrigerante, está ignorando a la mitad de información del paciente y a la mitad de los problemas que pueden suceder.

A medida que la metalurgia y el diseño de los motores se han vuelto más avanzados y tomando en cuenta la demanda de una mayor eficiencia del combustible y las emisiones, las temperaturas de funcionamiento de los motores han aumentado más de 40 grados Fahrenheit en los últimos 50 años. A raíz de esto se ha incrementado el énfasis en identificar y manejar correctamente los problemas asociados a cargas térmicas impuestas a los sistemas de refrigeración modernos.

Algunos de los problemas más comunes que pueden detectarse y solucionarse con el Análisis de refrigerante son:

1.  Verificación de la concentración correcta de glicol

Hay muchas causas que ocasionan que la concentración de glicol no esté en la proporción adecuada, Algunas son:

  1. Adición o relleno del sistema con agua en proporciones incorrectas.
  2. Pérdida de agua debido ebullición de un tapón de presión defectuoso y/o el agua de lavado que queda en el sistema.

Cuando la concentración de glicol no es la adecuada y según las especificaciones del fabricante, se producen problemas como congelación del refrigerante y del bloque del motor, daños en las juntas y/o sobrecalentamiento. Esto reduce la vida del lubricante y puede causar un fallo prematuro del motor.

2.  ¿Niveles de pH, acidez, fuera de especificación?

La supervisión del pH del refrigerante permite evitar problemas en el sistema de refrigeración. El nivel de pH aceptable de un refrigerante de motor varía en función de la formulación del refrigerante. Los problemas que pueden darse cuando el pH está fuera de especificación incluyen corrosión de los componentes de hierro y otros metales que a menudo resulta en picaduras de las camisas del motor, por ejemplo. Además, elementos corrosivos atacarán los sistemas de Recirculación de Gases EGR o cualquier otro dispositivo del sistema. El problema se agrava cuando los inhibidores de la protección contra la corrosión se disuelven, lo cual provoca obstrucciones y un flujo inadecuado del refrigerante. Cuando el refrigerante no puede circular adecuadamente, el calor no puede ser eliminado de forma eficiente del motor y el lubricante se degrada más rápido resultando en intervalos de drenaje más cortos.

3.  Uso de inadecuados Inhibidores de protección contra la Corrosión

La finalidad de los inhibidores de protección contra la corrosión es mantener el pH, evitar la formación de espuma e impedir la corrosión de superficies metálicas internas. Cuando existe corrosión en el sistema de refrigeración, el calor no se elimina eficazmente. Además, un ambiente corrosivo atacará la mayoría de las juntas de soldadura causando agujeros y fugas en el sistema. Estas fugas causarán problemas secundarios como ebullición del refrigerante interno, contaminación y reacciones químicas adversas.

4.  Encontrar fuentes de contaminación

Hay muchas fuentes posibles de contaminación que pueden dañar el sistema de refrigeración y, en última instancia, el motor. Para nuestros propósitos, nos enfocamos en la fuente más prevenible: el agua, que se utiliza para diluir el refrigerante concentrado o rellenar el sistema. El uso de agua que no cumple con especificaciones ASTM y/o del fabricante OEM, aumentan la formación de incrustaciones y el potencial de corrosión dentro del sistema de refrigeración. Incluso el agua “limpia” del grifo puede contener magnesio, calcio, sulfato o cloruro en niveles perjudiciales para el equipo. Las incrustaciones se forman en puntos en los cuales se da transferencia de calor y actúan como aislante, provocando sobrecalentamiento y daños en el motor.

Si desea obtener más información sobre la adición de agua a su sistema de refrigeración, vea nuestro vídeo aquí.

5.  Detección anticipada de fallos en el Refrigerante

Los Análisis de refrigerante pueden indicar fugas de gases de combustión, fugas de aire, degradación del glicol, problemas eléctricos y contaminantes. Cada problema causará reacciones químicas en el sistema de refrigeración, lo que provocará un fallo. Con una detección temprana, se puede programar el tiempo de inactividad para las reparaciones. Corregir el problema ayudará a prevenir un fallo completo del motor o un tiempo de inactividad inesperado.

La corrosión se produce a un ritmo más lento que el desgaste del motor. Esta es la razón por la que las averías del motor son más frecuentes, pero a menudo se deben a problemas en el sistema de refrigeración. El sistema de refrigeración debe ser capaz de hacer circular el refrigerante, eliminar el calor del sistema y disipar el calor para que funcione correctamente. Cuando el sistema de refrigeración no es capaz de circular o eliminar el calor de manera eficaz, veremos una reducción de la vida útil del lubricante, un mayor desgaste del motor, y / o problemas con los componentes del sistema, que a menudo resultan en un fallo prematuro del motor.

Compruebe todos los fluidos de su equipo.

La comprobación de todos los fluidos del equipo mediante la utilización de un programa eficaz de análisis de fluidos ayudará a reducir los tiempos de inactividad imprevistos y/o las sustituciones de equipos, lo que se traducirá en un mayor retorno de la inversión (ROI).