Equipos todoterreno: Combatir condiciones críticas

Nada hace descarrilar más la fiabilidad de sus equipos que un fallo crítico o un accidente durante su funcionamiento. En el mercado actual, existe una gran demanda de equipos debido a que la vida media de la mayoría de las flotas es de sólo cuatro años. Sin embargo, debido a problemas de suministro y a las condiciones económicas actuales, muchos buscan ampliar la vida útil de su flota.

Identificar el problema

Las duras condiciones de funcionamiento, las variaciones extremas de carga y los elevados costes que suponen los periodos de inactividad y la sustitución de equipos hacen que el análisis de fluidos sea una parte necesaria de la actividad empresarial en el sector de las máquinas todoterreno (construcción/agregados).

Se espera que los equipos pesados mantengan niveles máximos de rendimiento. A pesar de ser requeridos por esta industria; a menudo están expuestos a factores ambientales incontrolables diarios. Esto incluye humedad, abrasivos y temperatura. La contaminación y el desgaste son inminentes y, si no se controlan, pueden detener la producción en un santiamén.

Descubrir una solución

Las pruebas rutinarias identifican los pequeños problemas antes de que se conviertan en averías importantes, lo que le permite satisfacer las elevadas exigencias de sus clientes a tiempo y dentro del presupuesto. Maximice la fiabilidad de los activos y recupere el control de su producción supervisando todos los fluidos asociados al activo mediante análisis para identificar los contaminantes que causan desgaste, las propiedades de los fluidos y su efecto en el rendimiento de los componentes.

Supervisión de activos

Todos los componentes del activo deben ser supervisados y éstos pueden variar en función del tipo de activo. Los componentes con más activos incluyen:

  • Motor principal
  • Sistemas de transmisión (transmisiones, transmisión final/diferenciales)
  • Sistemas hidráulicos
  • Sistemas de refrigeración integrados (que refrigeran el motor, la transmisión y los sistemas hidráulicos)

El control de las propiedades de los fluidos puede variar según el fluido y el componente. Por ejemplo, en el aceite de motor controlamos las propiedades de desgaste.

Propiedades de los fluidos:

  • Aceite - La viscosidad, así como su capacidad para neutralizar los ácidos y dispersar y suspender las partículas de hollín producidas durante la combustión, pueden indicar si los niveles de aditivos antidesgaste y dispersantes/detergentes proporcionan suficiente protección al motor y tienen una buena estabilidad a la oxidación para evitar la formación de lodos.
  • Líquido refrigerante: el análisis del líquido refrigerante no se limita a probar las fórmulas del líquido: se trata de identificar problemas en el sistema de refrigeración que pueden ser perjudiciales para el rendimiento del motor y provocar su fallo prematuro.
  • Pruebas sobre el terreno - Control de las características visuales del refrigerante mediante tiras reactivas para determinar los niveles de protección contra la corrosión, el pH y el punto de congelación. Las pruebas de campo realizadas in situ deben utilizarse como herramienta de detección para determinar si es necesario realizar pruebas de laboratorio antes de lo programado.
  • Pruebas de laboratorio - Determinación de la validez de los problemas de corrosión de los metales del sistema, contaminación por agua dura, degradación temprana del glicol y otras propiedades químicas. Normalmente, se recomienda realizar las pruebas de laboratorio dos veces al año para los motores de uso normal (primavera y otoño) y cada trimestre para los motores de servicio extremo o de muchas horas.

Contaminación:

  • Abrasivos: la suciedad y el sílice pueden contaminar el aceite y provocar un desgaste excesivo del equipo.
  • Agua - Puede causar estragos en el rendimiento operativo y provocar graves daños en el equipo.

¿Por qué es tan importante la información para el análisis?

Existen complejos factores de interpretación que explican el resultado de cada prueba de la aplicación correspondiente. Esto incluye muestras definidas como grasa, combustible diésel, lubricante o refrigerantes. Sin el modelo de equipo específico, un laboratorio puede tener que basarse en puntos de datos genéricos para extrapolar la acumulación típica de desgaste. Estos límites podrían ser demasiado agresivos o no lo suficientemente agresivos para el tipo de equipo ensayado.

Una buena forma de calibrarlo es mediante el combustible. Las diferencias entre el gasóleo #1 y el #2 pueden observarse en varias pruebas de laboratorio. El gasóleo #1 tendrá resultados inferiores en Viscosidad, Punto de turbidez, Punto de fluidez y Destilación en relación con el gasóleo #2.

Las pruebas de fluidos recomendadas deben incluir:

  • Aceite - Metales elementales (desgaste, contaminantes, aditivo), Viscosidad, TAN/TBN, Combustible/Soot (si procede), Agua, recuento de partículas (si procede), PQ/Densidad férrica (si procede)
  • Refrigerante - Metales elementales (Corrosión, contaminantes, aditivo), Glicol, Punto de ebullición, Nitrato, HPLC Ácidos carboxílicos y azoles, SCA (si procede), Conductancia específica, Dureza, Visuales y Cromatografía IC (Contaminantes y ácidos de degradación).
  • Combustible - Póngase en contacto con su laboratorio de análisis de fluidos para determinar sus necesidades. ASTM D975, NFPA-110 o cuestiones específicas pueden determinar la prueba correcta.
  • Grasa - Póngase en contacto con su laboratorio de análisis de fluidos para determinar sus necesidades.

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Publicado el 23 de abril de 2024